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Luego de sufrir un atentado el 7 de Junio de 2025 y estar dos meses hospitalizado en los que fue sometido a varias cirugías criticas, muere el 11 de agosto de 2025 el senador Miguel Uribe.
“Lo que él quisiera para todos nosotros los colombianos es unión, paz y amor Rechazo cualquier acto de violencia o cualquier acto de venganza por la muerte de Miguel”- expresó su esposa María Claudia Tarazona tras su llegada al congreso donde fue velado el senador.
Recuento de los hechos
El 7 de junio de 2025, Miguel Uribe Turbay, senador y precandidato presidencial en Colombia, fue víctima de un atentado mientras participaba en un evento público en el parque El Golfito, en Bogotá. Durante el acto, un adolescente le disparó varias veces, hiriéndolo gravemente en la cabeza, el cuello y una pierna. Fue trasladado de urgencia a un hospital donde permaneció en estado crítico durante más de dos meses. Las autoridades capturaron al atacante en el lugar de los hechos, quien declaró haber actuado por dinero, lo que llevó a la detención de otras personas vinculadas a la planificación del atentado.
Las investigaciones apuntaron a una posible participación de disidencias de las FARC como autores intelectuales, aunque uno de los grupos negó su implicación. La detención de Elder José Arteaga, alias “El Costeño”, presunto coordinador del ataque, fue clave para el avance del caso. A pesar de los esfuerzos médicos, Uribe Turbay sufrió múltiples complicaciones neurológicas, y finalmente falleció el 11 de agosto de 2025 por una hemorragia en el sistema nervioso central. Su muerte fue confirmada por la Fundación Clínica Santa Fe, donde había estado hospitalizado desde el atentado.
La noticia generó conmoción a nivel nacional. Se realizaron marchas, homenajes y vigilias en distintos puntos del país, en especial en el lugar del ataque. La Torre Colpatria proyectó su imagen como símbolo de luto, y Bogotá decretó tres días de duelo. Diversas figuras públicas, tanto nacionales como extranjeras, condenaron el atentado y expresaron su solidaridad con la familia. El asesinato de Miguel Uribe reabrió el debate sobre la violencia política en Colombia y la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad para los líderes en campaña.
